Caminaba una mujer llamada Alicia por el bosque cuando escuchó una débil voz a sus pies.
Se agachó y descubrió que quien le hablaba era una sapito :
-- Soy un príncipe hermoso, erótico y
sensual, diestro en todos los placeres
de la carne y el amor. El rey malo,
envidioso de mis encantos, me
convirtió en sapo, pero sí me das un
beso volveré a ser bello. Entonces te
daré todos los goces y deleites que mi
voluptuoso temperamento puede
producir.
Sin decir nada, Alicia levantó el sapito, se la echó al bolsillo y siguió muy campante su camino.... Desconcertado el sapito, de pronto, asomó la cabeza y le preguntó:
-- ¿Qué? ¿No me vas a besar?
-- ¡¡Por supuesto que no!!
Respondió la anciana ...
-- A mi edad es mucho más divertido
tener un sapo que habla, que un pinche
viejo loco, insaciable y maniático
sexual, que venga a trastocar mi Feliz
soledad y chingarme toda mi
pensión...... ni madres!!!!!.......
藍藍藍浪
Tomen nota jubiladas!!
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